El fracaso como tal es un espectro. Este término tan usado en nuestras vidas puede variar desde un fracaso personal que no es visto bien socialmente, como por ejemplo un divorcio (ante generaciones muchos mas grandes claro está); hasta un fracaso laboral como ser despedido. Pero por más drama que podamos agregarle al verbo de fracasar, la realidad es que es nuestra propia percepción del fracaso lo que a menudo se exagera. Cuando consideramos el fracaso como todo menos la perfección, la vida se complica muchísimo. Entonces, pase lo que pase, tus acciones nunca serán lo suficientemente buenas. Y eso es agotador.
Si recientemente consideras que has tenido un gran fracaso en tu vida laboral, pero no sabes medir el nivel de gravedad que éste tiene consigo, aquí te damos algunas preguntas que debes hacerte antes de entrar en pánico. Considera esto como una práctica para poco a poco quitarle peso a la acción de equivocarse en el trabajo y normalizarlo más.
Aquí están las 3 preguntas que deberás hacer cada vez que sientas que fracasaste:
Piensa en el tiempo y espacio
El fracaso reciente aún te tiene preocupado, tus emociones están a flor de piel y quisieras poder regresar el tiempo y cambiarlo todo. Respira hondo y formúlate estas preguntas para entender mejor lo que acaba de pasar:
¿Qué tanto importará este fracaso dentro de un año? ¿Dentro de cinco años? ¿Dentro de diez años?
¿Este fracaso será un obstáculo para mis objetivos a largo plazo?
¿Este fracaso estaba bajo mi control? ¿Fue sido responsabilidad mía?
Analiza las personas y competencias a tu alrededor
En este paso deberás mirar con perspectiva lo sucedidio y ser objetivo de quién influyó en este fracaso. Aquí algunas preguntas para ello:
¿Fallé porque no sabía hacer algo? ¿Me faltaban habilidades?
¿Afectó este fracaso a alguien más? Si es así, ¿a quién? ¿Cómo les afectó?
¿Quién me apoyó cuando fracasé? ¿Quién no? ¿Fue la falta de apoyo la razón por la que fracasé?
Si fuera mi amigo el que fracasara y no yo, ¿vería el fracaso de la misma manera?
Mira hacia delante
Es hora de salir adelante y dejar atrás el fracaso, la vida sigue. Estas preguntas son las que te llevarán a la siguiente etapa en la que ya lograste perdonarte por lo cometido.
¿Qué he aprendido de este fracaso?
¿Ha salido algo bueno de este fracaso?
¿Hay algo que pueda hacer para arreglar este fracaso?
¿Qué necesito para superar este fracaso?
Cuando llegue el momento, ¿qué puedo hacer para superar este fracaso?
¿Cómo puedo ampliar mi concepto de "fracaso" y "éxito" para que no sea sólo una cosa o la otra?
Estos pasos son el inicio para que puedas dejar atrás el sentimiento horrible de equivocarte y sentirte mal contigo mismo. Estamos seguros de que, una vez te hayas hecho las preguntas, el problema se verá mucho más pequeño de lo que se sentía en un inicio y podrás seguir adelante.
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